martes, 11 de agosto de 2009

Y tengo un seguidor

¿Y yo para que quiero que me sigan?
Tienes suerte de que no sea tan paranoico como otros, sino ahora mismo estaría corriendo despavorido, volteando en cada esquina a ver si no me sigues.
¿Seré tan paranoico como para revisar cada entrada todos los días intentando averiguar que has leído, que has pensado (¿piensas?), que has sentido?
¡Ja!, supongo que mi hueva, que es casi infinita, le ganará a mi paranoia y pronto olvidaré que estás ahí, observándome, midiéndome, estudiándome. Pero hasta que eso suceda, puedes estar seguro de que yo también estaré ahí, siguiéndote, buscándote, espiándote.
"Ten miedo de mí"...



* Nota: (en realidad debería ser "Ten miedo de Marte.. y de Limolín" :p)

1 comentario:

Arianrhod dijo...

Ya viste todas las connotaciones que hay en la palabra Seguidor. Imagina que eres un malhechor (sólo imagina, ¿entendido?) y un grupo de policías internacionales te va "siguiendo", te alcanzan en una ciudad en el momento justo en que ibas a entrar a trabajar. Te habías metido primero a un café en el que tres agentes estaban listos para detenerte, pero te escabulles. Vas a un estacionamiento a disfrazarte, pero no te pierden la pista y te siguen "persiguiendo".. . total para no hacerla cansada, te alcanzan cuando estás a punto de asaltar un banco y descubren en tu historial médico, porque al irte "siguiendo" necesitan elementos para dar con tu identidad, que tienes paranoia. ¿Te imaginas? un malhechor con paranoia, con alucines de persecución y al final tus "seguidores" te alcanzan, tus alucinaciones no lo eran y TODO era cierto.